El inicio del proceso de enseñanza-aprendizaje de la lectoescritura es un mundo mágico que se abre entre infantil y en el  ciclo inicial de primaria. A veces es un proceso vivido con prisa y presión. ¿Cuál sería el reto? Conseguir huir de la prisa y la presión, respetar los ritmos de los niños y acompañarlos de bien cerca en este aprendizaje.