Ser padres de niños pequeños y preadolescentes es un reto constante. Queremos darles lo mejor, estar presentes, pero también necesitamos trabajar, desarrollarnos profesionalmente y, ojo, también cuidarnos a nosotros mismos y nuestra relación de pareja.
Hoy vamos a afrontar ese reto y vamos a compartir algunas claves para lograr un equilibrio realista y sano entre el trabajo, la familia y el autocuidado. Porque no se trata de hacer más, sino de hacer mejor.
Hoy vamos a afrontar ese reto y vamos a compartir algunas claves para lograr un equilibrio realista y sano entre el trabajo, la familia y el autocuidado. Porque no se trata de hacer más, sino de hacer mejor.